Una mujer joven, Karin, se contempla desnuda en el espejo para comprobar los estragos producidos en su cuerpo por su reciente maternidad. La narración, una novela breve, es corta en extensión y en la relación espacio tiempo. Manifiesta una soledad intensa, dura y cruel, acrecentada por la presencia de la hija y la ausencia del padre. Las reflexiones que a lo largo de la novela expone la protagonista, son íntimas, exquisitas y al mismo tiempo despiadadas.